f t g m
  • Aminoácidos

  • Enzimas

  • Meiosis

  • Metabolismo

  • PCR

  • ATP

  • Traducción

  • Polen de Diplotaxis siettiana (MEB, 4000 aumentos)

Copyright 2024 - BiologíaSur: Un proyecto abierto

Ejercicios

Variadas

Complementos

1.2.1.1. Composición, estructura y actividad biológica.

Los virus pueden alternar entre dos estados distintos, intracelular y extracelular.

En el estado extracelular la partícula viral o virión es inerte metabólicamente, siendo su única función transportar el ácido nucleico viral desde la célula en la que se ha reproducido hasta otra célula en la que se pueda reproducir. Según S. Luria, actúan como "pedacitos de herencia en busca de cromosomas". La morfología de los virus se refiere a este estado, en el que constan de ácido nucleico, cubierta y enzimas.

Un solo tipo de ácido nucleico, ADN o ARN, existiendo virus con modalidades de ácidos nucleicos no frecuentes, como ADN monocatenario y ARN bicatenario. Este genoma codifica básicamente enzimas para la replicación de su ácido nucleico. Puede estar formando una sola molécula o fragmentado en varias. Así, el virus del SIDA tiene dos moléculas idénticas de ARN, y el de la influenza consta de ocho fragmentos de ARN. Los virus difieren en el tamaño, cantidad y características de su ácido nucleico.

Una cubierta proteica o cápsida que aloja en su interior al ácido nucleico. Tiene como misión proteger al ácido nucleico y reconocer los lugares de unión y penetración de las células a parasitar, en aquellos virus que carecen de membranas externas. Está formada por repetición de proteínas globulares llamadas capsómeros. La variedad de estos capsómeros es baja, aunque su número sea elevado. Estos capsómeros se autoensamblan según una información contenida en ellos mismos, originando figuras simétricas, por lo que los virus pueden ser estructuras cristalizables. Al conjunto de cápsida y ácido nucleico se le conoce como nucleocápsida. Según su simetría, los virus pueden ser:

a) Virus de simetría helicoidal. Los capsómeros se disponen helicoidalmente, sobre la hélice de ácido nucleico, adquiriendo globalmente la forma de bastoncillo. A este tipo pertenece el virus del mosaico del tabaco y el virus de la rabia.

Esquema de un virus helicoidal

b) Virus de simetría icosaédrica. Adoptan la forma de un poliedro de 20 caras triangulares, obtenidas por la asociación de varios tipos de capsómeros. En conjunto tienen un aspecto casi esférico. Pueden tener proteínas fibrilares que salen del icosaedro. Ejemplos de esta modalidad son los adenovirus y el virus de la polio.

Esquema de un virus con simetría icosaédrica

c) Virus complejos. Compuestos de varias partes diferentes, de forma y simetría distinta. Los bacteriófagos son ejemplos de este grupo. Constan de cabeza icosaédrica donde se aloja el ácido nucleico, cola helicoidal que se puede contraer para inyectar el contenido de la cabeza, estando separados por un collar o cuello formado por capsómeros distintos. Al final de la cola está la placa basal, especializada en la fijación sobre la célula hospedadora. De ella parten unas fibras que potencian esta fijación. Estos virus deben tener más cantidad de ácido nucleico que otros virus, pues necesitan codificar varios tipos de capsómeros.

Esquema de un virus complejo: bacteriófago T4

d) Virus envueltos. Tienen rodeada la nucleocápsida por estructuras membranosas lipoproteicas, que son fragmentos de la membrana de la célula hospedadora en la que se llevó a cabo la reproducción viral. De estas membranas pueden partir espículas, con capacidad enzimática, normalmente codificadas por el propio virus. Los virus que no tienen estas membranas, y sólo tienen nucleocápsida se conocen como virus desnudos. 

 

A

B

Esquema de un virus desnudo (A) y con envoltura (B)

 

Enzimas virales. Aunque los viriones no tienen metabolismo fuera de la célula hospedadora, es decir, son inertes, pueden contener enzimas que actúan en el proceso infeccioso, ya sea en la entrada o salida de las células en las que se han reproducido o en la replicación o transcripción de su genoma.

Como vemos, los virus carecen de citoplasma, de orgánulos y de enzimas con los que realizar metabolismo alguno, y la única función vital que realizan es la reproducción dentro de una célula viva.

En el estado intracelular el ácido nucleico se integra en la célula hospedadora. El virus se reproduce, replicando su genoma y sintetizando los componentes de la cubierta del virus. Su "aspecto" está en función de la fase del ciclo reproductor en la que se encuentre.

 

​ 

Cookies